"La relación entre poesía y pintura o artes plásticas viene desde la Antigüedad y fue retomada a partir del Romanticismo hasta nuestros días. En este libro, el poema trabaja partiendo de una referencia visual que puede ser adivinada según el título, pero en muchos casos es una sugerencia para que el lector recupere, en su imaginación, ese retrato que las palabras dibujan. Ecos de una presencia, signos de vidas que se perdieron, nostalgia de una belleza que desaparece, lo que aquí importa es el gesto de restituir un sentimiento a cada uno de esos rostros o cuerpos que permanecen en la soledad de las salas de los museos, y liberarlos de su inútil belleza para una nueva convivencia a través de la poesía"
Edición bilingüe (portugués-español) a cargo de Elkin Obregón S.